1.1 Género y sexo

El sexo se refiere a las diferencias biológicas y anatómicas entre mujeres y hombres, determinadas por características físicas como los órganos reproductivos, los cromosomas y las hormonas. Estas diferencias son innatas y no varían según la cultura o el contexto social.

El género, en cambio, abarca las construcciones sociales y culturales que establecen los roles, comportamientos, expectativas y valores asignados a mujeres y hombres. Se basa en normas y estereotipos que varían según la época y la sociedad, influyendo en cómo cada persona es percibida y qué se espera de ella en función de su identidad de género.

1.2. Estereotipos y roles

Hablamos de estereotipos sociales cuando la representación de un grupo determinado se reduce a una imagen simplificada y generalizada, basada en creencias tradicionales o preconceptos arraigados.

Los estereotipos de género se refieren a las características que se asignan de manera rígida tanto a las mujeres como a los hombres. Por ejemplo, a las mujeres se les suele atribuir rasgos como la sensibilidad, la emotividad o la naturaleza maternal, mientras que a los hombres se les asocia con la agresividad, la competitividad o la distancia emocional. Como se puede observar, estos estereotipos están cargados de prejuicios y limitaciones que no reflejan la realidad compleja de las personas.

Además, los estereotipos de género pueden variar según el contexto cultural, la edad y el momento histórico. Por ejemplo, lo que una persona joven podría entender como un estereotipo de mujer o de hombre puede diferir significativamente de la percepción de una persona adulta mayor. Las sociedades y culturas más conservadoras tienden a aceptar estos estereotipos como verdades universales sobre lo que debe ser un hombre o una mujer, aunque, con la globalización y el cambio de paradigmas sociales, estas creencias se cuestionan cada vez más.

Algunos de los estereotipos más comunes son:

Es importante destacar que, a menudo, el concepto de estereotipo se utiliza como sinónimo de rol de género, sin embargo ambos términos tienen matices distintos. Los roles de género son los comportamientos, expectativas y responsabilidades que una sociedad patriarcal asigna a las personas en función de su sexo. Estos roles no solo limitan las oportunidades de las personas, sino que también perpetúan estructuras de poder desiguales que afectan la equidad entre géneros.